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Autor: Miguel Picado Filgueira
Tema: ¿Qué es IFC en BIM?
Si estás metido en el mundo de la arquitectura y la construcción estoy seguro que te suena el término BIM (si no es así, te espero en nuestro Curso Revit online). Puede que hasta hayas oído hablar de algo llamado IFC. Pero, ¿Realmente qué es IFC y por qué debería importarte? Vamos a destriparlo sin rodeos.
¿Qué es IFC en BIM?
Primero, lo básico. IFC son las siglas de Industry Foundation Classes. Vale, suena a un tecnicismo aburrido, pero aquí va lo interesante: el IFC es la clave para que todos los profesionales de un proyecto de construcción puedan entenderse sin tener que usar el mismo software. Desarrollado por buildingSMART, IFC es un estándar abierto, lo que significa que no está atado a ninguna marca ni programa específico. ¿Te imaginas? Tú trabajas en una plataforma, el ingeniero en otra, y el IFC hace de traductor, asegurando que todos manejéis la misma información, sin perder detalle.
Por qué el IFC en BIM debería quitarte el sueño (en el buen sentido)
La interoperabilidad. Esa palabreja que en realidad lo que significa es que todos los implicados en un proyecto, desde el arquitecto hasta el fontanero, pueden colaborar sin tirarse los trastos a la cabeza. Y aquí es donde el IFC brilla. No importa si uno usa AutoCAD y otro Revit; con IFC, todo el mundo tiene la piedra Rosetta del proyecto. Y esto no es poca cosa.
Además, como es un estándar abierto, no tienes que preocuparte de que un software se quede obsoleto o que cambien las reglas del juego a mitad de partido. El IFC está ahí, sólido como una roca, asegurando que el flujo de trabajo siga su curso sin contratiempos.
Beneficios del IFC que te hacen la vida más fácil
Si después de haberte explicado qué es IFC en BIM aún no te he convencido de su importancia, espera que te cuente los beneficios que aporta.
- Interoperabilidad sin drama: Olvídate de perder horas ajustando datos porque el software del ingeniero no se lleva bien con el tuyo. Con IFC, eso ya no es tu problema.
- Sostenibilidad por bandera: Al facilitar que todos los datos se compartan y reutilicen sin fallos, se evitan duplicidades y errores que podrían costar tiempo, dinero y recursos. Todo más sostenible y eficiente.
- Colaboración de verdad: No más excusas del tipo «es que mi programa no lo lee bien». Todos trabajan con la misma información, y eso significa menos malentendidos y más decisiones acertadas.
- Cumplir con la ley sin complicarte: En muchos países, si quieres trabajar en proyectos públicos, el uso de BIM e IFC no es una opción, es un requisito (IFC es un estándar internacional, ISO 16739-1:2024). Y mejor cumplir con lo que te piden que enfrentarte a problemas legales más tarde, ¿verdad?
Cómo usar un archivo IFC en Revit (sin complicarte la vida)
Vamos al grano. Si trabajas con Revit, importar un archivo IFC es pan comido. Aquí te dejo los pasos básicos para que no te pierdas:
- Importa el archivo IFC: Abre Revit y ve a la pestaña «Insertar». Allí encontrarás la opción «Importar IFC». Selecciona el archivo IFC que quieras usar y dale al botón de abrir. Fácil, ¿no?
- Configura las opciones de importación: Antes de darle a «Aceptar», asegúrate de revisar las opciones de importación. Puedes ajustar cómo se manejan los niveles, las categorías, e incluso definir si quieres importar solo ciertas partes del modelo. Esto te ayuda a personalizar lo que realmente necesitas.
- Revisa el modelo: Una vez importado, revisa que todo esté en orden. A veces puede haber ligeras diferencias en cómo se ven los elementos, así que date una vuelta por el modelo para asegurarte de que todo esté tal y como lo necesitas.
- Trabaja con el modelo IFC: Ahora puedes empezar a trabajar con el modelo como lo harías con cualquier otro proyecto de Revit. Puedes añadir elementos, hacer modificaciones, y sobre todo, colaborar con otros equipos sin preocuparte de que la información se pierda en el camino.
El lado oscuro del IFC (y cómo superarlo)
No todo es de color de rosa. Como todo en la vida, el IFC tiene sus desafíos. Es un estándar complejo, y la realidad es que no todos los software lo implementan de la misma manera. Esto puede llevar a pequeñas inconsistencias que, si no se gestionan bien, te pueden dar más de un dolor de cabeza.
Pero, ¿sabes qué? No te dejes desanimar. El IFC sigue evolucionando, mejorando con cada versión, y tanto buildingSMART como el resto de la comunidad BIM están continuamente trabajando para hacer del IFC una herramienta más robusta. Así que, aunque haya algunos baches en el camino, el futuro del IFC pinta bastante bien.
En resumen: ¿Te vas a quedar atrás?
El IFC es la columna vertebral de la colaboración en la construcción digital con BIM. Si aún no lo estás usando, es hora de que te subas al tren. No solo te hará la vida más fácil, sino que te permitirá estar al día con las exigencias del mercado y de la ley. Y, lo más importante, te asegurará que todos en tu equipo, desde el más novato hasta el más experimentado, hablen el mismo idioma.
Así que la próxima vez que escuches la pregunta de qué es IFC, ya sabrás que no es un término más en el glosario de BIM, sino tu mejor aliado en la jungla de la construcción digital. Y si trabajas en Revit, ya sabes que integrarlo en tu flujo de trabajo es más sencillo que nunca. Si quieres convertirte en un experto en metodología BIM y aprender a utilizar el formato IFC, echa un vistazo a nuestro Máster BIM Management. ¡No hay excusas!
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